Cada porrazo recibido,
cada patada e insulto,
cada abuso de poder,
cada carrera,
y cada momento de incertidumbre
cada grito de terror,
y cada humillación
cada detención ilegal
cada provocación,
y cada sensación de impotencia,
cada lágrima derramada
y cada gota de sangre vertida en las calles,
cada maratón
y cada momento de soledad después
de una tormenta de hostias.
Cada bofetón en la cara...
Esta injusticia se volverá en vuestra contra,
serán las causas
de lo que os espera.
Porque no se lo dais a una cría
ni a un fotógrafo,
ni a un medico
ni al estudiante sin beca
ni al parado al que los bancos han robado su casa
ni a mi amigo Jorge
ni al jubilado al que pegasteis con la misma fuerza hace mas de 30 años.
Nos lo dais a todos a todo un pueblo que ruge
y algún día cambiara el orden establecido
de este esquizofrénico mundo
cuya única religión que profesa
es la del dinero...
Algún día esta lucha habrá merecido la pena.
Dedicado a todas aquellas personas que han sufrido la brutalidad policial en estos últimos días y a lo largo de la historia.
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